Necesito tiempo. Tiempo para aprender, y aprender muchas cosas. Pero hay una que me cuesta aprender, y mucho. En verdad hay muchas que me cuestan, aprender a afrontar miedos, a llenar carencias; aprender a quitarle importancia al destiempo, aprender a reaccionar ante los ojos que se desvían, y podría seguir hasta completar un catálogo de inseguridades del que soy más o menos consciente. Pero, sobre todo, hay un aprendizaje que, cada fracción de tiempo que pasa, creo más difícil. No se trata de aprender a vivir, para eso no hay lecciones más que tu aliento diario. Para mí se trata de aprender a ser libre, a caminar pudiendo tomar las decisiones sin lastres ni hipotecas de cualquier tipo.
Hay veces que sueño que cierro los ojos, y cuando los abro he aprendido a mirar en libertad. Con lo que ello supone. Observo, miro, actúo sin cadenas, sin prejuicios, sin condicionamientos. Pero es un sueño. Sin embargo, también hay veces en que confundo el sueño con la realidad, en que olvido los lastres, las preocupaciones, los dolores y responsabilidades, y sólo respiro, miro, vivo. Suele coincidir con los momentos en que me abandono al mar. Pero, últimamente, y quizás por eso me estoy aficionando tanto a la escalada, también me ocurre con la brisa y la montaña.
Hoy ha sido uno de esos días en que necesitaba abandonarme en la naturaleza. Hoy ha sido uno de esos días en que los amigos, los de siempre y los de ahora, te dan esa oportunidad, te enseñan a mirar entre el sendero y el ascenso. Hoy ha sido uno de esos días en que la mirada y la respiración han alzado el vuelo, a
Y me he sentido pequeño y grande a la vez, he respirado, cerrado los ojos y deseado ser libre. Y, durante unos breves segundos, lo he sido, con una mirada limpia y una respiración pausada. Libre.
Necesito tiempo, para nacer en muchas cosas, para aprender sobre otras tantas, y desaprender sobre algunas. Necesito tiempo, y ayuda, para soñar la libertad, para borrar miedos. Necesito tiempo para direccionar mis pasos y conocer, comprender. Necesito tiempo, y me asusta no saber cuánto.
Mientras tanto, esta tarde, esta noche, aún siento esa mirada limpia, en vuelo, libre.
Alvarito qué ciertas tus palabras! Una vez más, coincido contigo. La necesidad de abandonarme a la naturaleza, buscar respuestas, sentir que el tiempo se me escurre...y no puedo hacer nada para detener su marcha..
ResponderEliminarCreo que es menester buscar un hobby que nos acerque a nosotros mismos, que nos ayude a una instrospección fundamental para escuchar nuestras voces, a interpretar los silencios que nos rodean..
Y con respecto a tu necesidad de aprender, te voy a dedicar unas líneas que publicaré la semana entrante, pero que me parecen acertadísimas para vos y tu momento especial:
Solo con el tiempo
" Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano y encadenar un alma;
y uno aprende
que el amor no significa acostarse y que una compañía no
significa seguridad, y uno empieza a aprender...
Que los besos no son contratos y los regalos no son
promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la
cabeza alta y los ojos abiertos,
y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes...
y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.
Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado,
hasta el calor del sol quema.
Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma,
en lugar de esperar a que
alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno
realmente es fuerte, que uno realmente vale,
y uno aprende y aprende...
y con cada día uno aprende.
Con el tiempo aprendes que estar con alguien
porque te ofrece un buen futuro significa que tarde o temprano
querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de
amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede
brindarte toda la felicidad que deseas.
Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de
esa persona sólo por acompañar tu soledad,
irremediablemente acabarás deseando no volver a verla.
Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados,
y que el que no lucha por ellos tarde o temprano
se verá rodeado sólo de amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un
momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste,
durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace,
pero perdonar es sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo
duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.
Con el tiempo te das cuenta de que aunque seas feliz
con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que
dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia
vivida con cada persona es irrepetible.
Uno aprende....y uno aprende ..
..y aprende...
..con cada día uno aprende "
Besotes guapo!
(conste que esto es una primicia, te lo dedico especialmente a vos!..)
Ay Natalia, qué hermoso lo que escribes y que gran regalo que me dediques la primicia! Uno aprende, aprende... aprende... con el tiempo, y siempre obtiene algo, la mayoría de las veces que la vida regala, y quita; y que hay palabras al otro lado de un océano inmenso que sientes tan cerca que erizan tu piel. Yo hoy he aprendido que tú eres un regalo. Con cada día aprendo. Gracias de corazón
ResponderEliminarHermosas reflexiones de un espíritu que tiene lo primero que se necesita para ser libre, la consciencia y la voluntad de serlo.
ResponderEliminarUn besazo.
Álvaro , preciosas palabras , con las que coincido y que por suerte o por desgracia comparto contigo , ya que como tu bien dices, es tan difícil mirar y vivir determinados momentos sin que prejuicios o experiencias pasadas determinen o influyan sobremanera en tu presente y posible futuro ... , pero con estas palabras también demuestras esas ganas de seguir aprendiendo a vivir y a sentir , que son el camino correcto para llegar a VIVIR con letras mayusculas , pues ,como sabiamente me escribió una vez un profesor y amigo, convirtiendo esa frase una máxima en mi vida: ''el conocimiento te da la libertad , que nadie te quite ese derecho ... '' Un abrazo Inmensísimo
ResponderEliminarMe hice seguidora después de haber leído este, aunque los demás también son fantásticos. Hay aquí una demanda que va contra la naturaleza de lo humano, que es mortal, y sin embargo forma parte también de ella que siempre me ha llamado la atención, al fin y al cabo, es la dialéctica que nos mueve. Ganar tiempo para ganar libertad, aprender a aprender y a desaprender también. Es precioso, me he sentido muy identificada y me encanta tu narrativa, tan reflexiva y lírica, tan pausada y profunda. Un abrazo, Álvaro, te sigo.
ResponderEliminarHola Alvaro,
ResponderEliminarAunque aún no me había hecho seguidor de tu blog, lo leía todas las semanas, y de verdad de parece genial. Sólo hay una cosa que se me escapa un poco... Entonces, ¿los de asuntos internos sabían que les estaban tendiendo una trampa?
Un abrazo Alvaro, y a ver cuando te dejas caer por San Vicente, que por aquí hay unas pintas que llevan tu nombre.
Te leo por aquí...
Cariño, perdona que haga tanto tiempo que no comparta contigo todos estos anhelos transcritos en palabras y que conociéndote se que te resulta más fácil expresarlos de esta forma.
ResponderEliminarMe considero una de esas amigas de las de siempre y ni que decir tiene que me tienes siempre que necesites respirar y quitarte lastres. Quizá esos lastres, que en mayor o menor medida todos llevamos, son la consecuencia de no estar solo en el mundo, de tener familia, alumnos a los que enseñar y amigos a los que querer y cuidar; pero imagina por un momento que todo éso no existiera, que de verdad esos "lastres" con sus virtudes y desventajas no te rodearan, ¿crees que esa ansiada libertad te haría feliz?, pondría mi mano en el fuego a que no lo serías.
La única medicina para sentirse feliz con nosotros mismos no es la libertad absoluta sino el aprendizaje diario que nos ayude a pelear contra los lastres de la vida para superarlos y así entonces respirar de verdad.
te quiero
Vanessa, siempre espíritu afín, hace tiempo que no nos vemos, debemos coincidir. Bs
ResponderEliminarSuly, me emociona que conserves esas palabras, siempre será un privilegio haber sido tu profesor, pero sobre todo amigo. Un abrazo enorme
Alba, muchísimas gracias por tus palabras y por el detalle de seguirme. Ganar tiempo para ganar libertad, y aprender/desaprender son pauta en este devenir que a veces nos confunde si no hacemos una parada necesaria. Tus palabras, aquí y en tu blog, ayudan a esa necesidad. Un abrazo.
Paco, gracias por estar ahí, y por leerme. Necesito veros pronto y saborear esas pintas. Un abrazo
Julia, no me pidas perdón porque tú siempre estás en mí, en cada cosa que hago y siento. La libertad es hermosa cuando presenta obstáculos y se superan, o no, así se valora. No busco la absoluta, porque soy imperfecto y me atraen las imperfecciones. Aprendo a diario, lo sabes, y de tí siempre, porque formas parte de mí. Muchas veces has sido ese respiro, lo más cercano a la libertad. Te quiero tanto que no podrían atraparlo las palabras
ResponderEliminarAlvaro: comparto tus palabras y estoy de acuerdo contigo en que siempre necesitamos tiempo para reaprender y depurar los sentimientos. Gracias por pasarte por mi blog y utilizar mi poemas. Es un placer para mi que lo hayas hecho. Te seguiré leyendo y espero pronto sentirme con ánimos para compartir en mi blog.
ResponderEliminarAbrazos y espero leerte pronto.
Álvaro, me alegro de que vayas encontrando caminitos que te satisfagan. Te mando unos versitos de Machado, para que acompañen tus pasitos:
ResponderEliminarYo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!…
¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero
a lo largo del sendero…
-la tarde cayendo está-.
En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón...
Y para terminar, un cuentito q creo va a gustarte. Todos arrastramos cacitos, pero cuando los aceptamos los llevamos con donaire ! http://www.editorialjuventud.es/3781.html
Un beso muy fuerte, sigue escribiendo q tus palabritas son un remanso cristalino ! :D
Elizabeth, mucho ánimo en todo. A mi, en ocasiones, me ayuda expresar sentimientos a través de palabras, que me cuesta decir de otro modo. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarRocío, hermosos versos de Machado. Durant eun tiempo, gracias a una amiga Campos de Castilla fue un libro de cabecera. Tus selecciones siempre me llegan. Un beso enorme
Encantada Alvaro, te conocí por nuestra amiga Natalia y es un placer leerte.
ResponderEliminarPues el tiempo es subjetivo, yo creo que no es el tiempo que necesitas mas bien para mi es la conciencia que le pones, a cada cosa que le das el tiempo, el disfrute de todo instante así no dependerás del tiempo, porque ¿como se puede ganar al tiempo ,pocas veces creo paramos para decir, necesito tiempo.
si este no existe...
Tocas un tema, por demás súper interesante, y de esa forma real y con un hermoso lenguaje que tu sabes hacerlo, invita a detenerse un momento en este mundo tan de prisa y disfrutar de aquellas pequeñas cosas que normalmente son las mas importantes y enriquecedoras. Me fascinó y me encanto te felicito amigo. Muy bueno, si tuviera tiempo...haría tantas cosas que para la gente sería "perder el tiempo"... Un besote
y un mágnifico fin de semana!!!!
Bienvenida Pili, ser amiga de Natalia es convertirte ya en alguien especial. Y tienes mucha razón en la consciencia del tiempo, el disfrute o no de cada instante. Quizás cuándo digo necesito tiempo, necesito esa consciencia. Te esperaré por aquí, amiga. Un beso
ResponderEliminar