viernes, 20 de enero de 2012

Tu imagen



     Estas navidades, después de 30 años de la muerte de mi padre, mi madre me regaló unas imágenes en Super-8 que había pasado a DVD y que desconocía. Fue la primera vez que ví su imagen, junto a la mía, en acción real.  Su sonrisa, su forma de mirarme a los ojos, cómo me tendía la mano...Y siento que fue algo importante, me sentí niño, me sentí hijo. Perdonarme el atrevimiento del poema, lo necesitaba

Hace más de 30 años
que no se proyectaba tu imagen,
hoy la ví real,
la sentí cercana,
y todo pudo ser,
de nuevo.

Y decidí
poder recordar aún,
una niñez que ya no me recuerda;
poder vivir aún,
de las fotografías,
de las palabras que me leíste.
Poder regresar 
a tu imagen
al cerrar los ojos;
y poder callar aún
los silencios,
hasta el silencio
de aquello que no existe.

Y decidí poder engañar aún
el tiempo equivocado,
la presencia ausente;
poder rescatar aún
sueños,
ahogados en el olvido.
Poder caminar 
por ese raro país
en el que todo es encuentro
y poder perderme aún
en un pasado
que nunca fue presente.

Decidí poder construir aún
una vida
de ventanas abiertas;
poder sentir 
que no fue ayer
ni es hoy,
sino mañana,
y poder llorar aún
tu caricia
en mi mirada.

Hace más de 30 años
que no podía nada,
hoy me expliqué contigo,
y todo pudo ser, 
de nuevo.